Restos de la Colonización:
De la colonización de España en Cuba, que duró de 1511-1515 nacieron las
siete primeras villas: Baracoa, Bayamo, Trinidad, Sancti Spiritus, Santiago,
Camagüey y La Habana.
Baracoa
Situada en el extremo nororiental de la
Isla, fue la primera villa fundada por los españoles en el proceso de
colonización, la primera capital, y en ella radicó el primer obispado. Villa de
Nuestra Señora de la Asunción de Baracoa, fue el nombre que le diera el
Adelantado Diego Velázquez al bautizarla el 15 de agosto de 1511.
Con una flora y
una fauna de lujo, Baracoa seduce de inmediato a los amantes de la ecología, por
su gran biodiversidad. Más de 60 sitios arqueológicos perviven como huella de
la cultura taína, la más avanzada de la Isla a la llegada de los españoles.
Situada a los pies de una limpia bahía, Baracoa es ciudad de calles sinuosas,
vida animada y muy caribeña. Sus pobladores se dedican a la explotación de los
recursos forestales, la producción de Cacao y Chocolate, Coco, y Café. En la
Iglesia Mayor se exhibe la Cruz de la Parra, una de las 29 que plantara
Cristóbal Colón, en las tierras de América.
Su autenticidad
ha sido probada científicamente y es la única que sobrevive de aquel hecho. A
Baracoa se llega por vía aérea, desde la capital u otras ciudades orientales. Y
también por carretera, desde la ciudad de Guantánamo, a través del viaducto de
La Farola, una de las obras viales más bellas e imponentes del país. Cuenta con
los hoteles El Castillo, Porto Santo y La Rusa, así como Villa Maguanas.
Bayamo
Monumento Nacional y Cuna de la Nacionalidad Cubana, segunda de las
siete primeras villas fundadas por Diego Velázquez, el 5 de noviembre de 1513.
Bayamo es hoy la capital de la oriental provincia de Granma, ubicada al sudeste
del país.
Rica en tradiciones e
historia, se le conoce también como cuna de la nacionalidad cubana por los
grandes hitos del acontecer nacional que se desarrollaron allí. Fue capital de
la República en Armas, cuando los cubanos se alzaron por vez primea contra el
poder colonial español en 1868; lugar donde se compuso y cantó, al fragor de la
batalla, el Himno Nacional; ciudad cuyos habitantes prefirieron incendiarla
antes que entregarla de nuevo al enemigo, el 12 de enero de 1869. Tierra natal
de grandes próceres, como el amado Padre de la Patria, Carlos Manuel de
Céspedes.
Otro hecho notable,
vinculado a Bayamo, es que el 20 de octubre se celebra el Día de la Cultura
Cubana, porque en esa fecha de 1868, las tropas libertadoras de Céspedes
tomaron la ciudad y el pueblo cantó alborozado la marcha que con el tiempo se
convirtiera en Himno Nacional.
Es rica en las
arquitecturas variadas, donde sobreviven algunas edificaciones de antes del
incendio y en su centro histórico está el antiguo convento de Santo Domingo,
hoy convertido en una sala teatro. Los bayameses han conservado, desde siempre,
la tradición de transportarse indistintamente por antiguos coches de caballos,
a la usanza colonial, costumbre que ha empezado a reaparecer en otros pueblos
de la Isla.
Santiago de Cuba
Fundada en 1515, Hernán Cortés fue su primer
alcalde y en ella radicó la capital del país desde esa fecha hasta 1589, cuando
tales funciones pasaron a la ciudad de La Habana. Santiago de Cuba tiene fama,
bien ganada, de ser la más caribeña de las ciudades cubanas. No sólo por su
ubicación geográfica, pues es una ciudad-puerto bañada por las cálidas aguas
del Mar Caribe, al sur de la región oriental. La arquitectura en general tiene
la impronta española, con su tradicional acento morisco. En la ciudad funcionan
15 museos y numerosas instituciones culturales de prestigio. Se dice que en
ella nació el bolero, porque allí vio la luz Pepe Sánchez, el autor de la
primera pieza de ese género a fines del Siglo XIX.
A Santiago, sus
habitantes la llaman con orgullo Capital de la Historia y Ciudad Heroica.
Veintinueve generales de las gestas emancipadoras nacieron allí. El 26 de julio
de 1953, un grupo de jóvenes liderados por Fidel Castro asaltó el Cuartel
Moncada, de esa ciudad, iniciando la última etapa liberadora del país, entonces
bajo una cruenta tiranía.
En el Cementerio Santa
Ifigenia reposan los restos de José Martí, el Héroe Nacional de Cuba. Hoy
Santiago de Cuba es la capital de una provincia del mismo nombre. Cuenta con un
aeropuerto internacional y a ella también se llega por modernas carreteras y
ferrocarril. Posee una adecuada infraestructura hotelera, con más de 2000
habitaciones. El Castillo de San Pedro de la Roca fue declarado por la Unesco
en 1997 como Patrimonio de la Humanidad, donde se cita como "el más
completo y mejor preservado ejemplo de la arquitectura militar
Hispanoamericana, basado en principios de diseño italiano y Renacentista así
como Los paisajes arqueológicos de las primeras plantaciones de café del
sudeste de Cuba fueron declaradas por la Unesco en 2000 como Patrimonio de la
Humanidad por ser una evidencia única de una forma pionera de la agricultura en
un terreno difícil. Pero es importante, al referirnos a paisajes naturales,
hacer referencia también al Parque Baconao, inscripto en 1987 por la UNESCO en
la Red Mundial de Reservas de la Biosfera.
Camaguey
Es una
ciudad situada en el centro-oeste de Cuba, capital de la provincia homónima.
Fue fundada el 2 de febrero de 1514 como villa, llamada Santa María del Puerto
del Príncipe, la tercera en Cuba. El centro histórico de la ciudad fue nombrado
en 2008 Patrimonio de la Humanidad. El nombre actual lo debe al cacique
Camaguebax, quien ejercía su mando entre los ríos Tínima y Hatibonico, donde
empezaron a construirse las primeras casas. Cuna de figuras ilustres, como
Joaquín de Agüero o Ignacio Agramonte, conocido como "El Mayor", que
combatió contra las tropas españolas, y que fue el primero en darle la libertad
a los esclavos. Aquí en esta ciudad también nació el Poeta Nacional de Cuba
Nicolás Guillén.
La provincia, de la
cual es su capital, es la más extensa del país y una de la menor densidad de
población. Por sus extensas llanuras que ocupan casi la totalidad del
territorio, Camagüey es la provincia más ganadera del país. Con sus
sorprendentes plazas, e iglesias y sus calles concurrentes, únicas de allí, la
tercera ciudad más importante de Cuba posee el mayor centro histórico (330 ha) del
país. Sus museos y templos, que guardan tesoros del arte funerario de los Siglo
XVII, XVIII y XIX, son parte de un paisaje urbano difícil de igualar.
Trinidad
Ubicada en el
centro sur del país. Fue la tercera villa fundada por la Corona española en
Cuba, a principios de 1514. La villa se fundó con la presencia del Adelantado
Diego Velásquez de Cuéllar, y fue evolucionando con rapidez, gracias a la
actitud emprendedora de sus habitantes, lo cual le posibilitó ser una de las
más prósperas de la mayor de las Antillas.
Trinidad es la ciudad
cubana que conserva con mayor fidelidad la impronta de su pasado colonial.
Caminar por las calles y plazas de su centro histórico puede resultar un viaje
en el tiempo, tal vez a principios del Siglo XIX cuando la villa prosperaba al
calor del boom azucarero que se registraba en la Isla
La ciudad conserva,
casi inalterados, conjuntos arquitectónicos de gran valor: calles, plazas y
plazuelas empedradas, edificaciones cubiertas con tejados de barro, con estilos
arquitectónicos provenientes de Andalucía y Canarias. A poca distancia de
Trinidad se encuentra el afamado Valle de los Ingenios. En los finales del
Siglo XVIII, se acelera el desarrollo agrícola cañero debido al floreciente
comercio con el resto de las islas de la región y la entrada de gran cantidad
de esclavos a las plantaciones. Lo que genera la construcción de numerosos
ingenios en los valles cercanos. Las ideas de la Revolución francesa y la
independencia de el resto del continente tuvieron un gran impacto en Trinidad.
Santi Spíritus
La
villa de Sancti Spíritus , fue fundada en junio de 1514 por Diego Velázquez de
Cuéllar, pero en 1522 se traslada hasta las orillas del Río Yayabo en búsqueda
de mejoría económica, ubicación que mantiene hoy, Francisco Iznaga, rico
propietario vasco asentado en la región oriental de Cuba durante los primeros
decenios de la colonización de la isla. Magón, sonoro y legendario, era el
nombre que los aborígenes daban a la región donde se levantara la villa de
Sancti Spíritus.
En 1522, los españoles
la trasladaron para el lugar definitivo, en las márgenes del río Yayabo, a unos
ocho kilómetros del lugar original. Como era costumbre, al principio el poblado
se desarrolló en los alrededores de una iglesia mayor y de una plaza aledaña.
En el Siglo XVII tuvo un despegue económico, que posibilitó el surgimiento de
una ciudad limpia y tranquila, de serpenteantes calles empedradas donde bullía
la vida con el tono apacible y colorido de las comunidades de provincias.
En el XIX se produjo
un verdadero afán constructivo y abundaron las edificaciones de gran calidad,
algunas de las cuales perduran hasta hoy. Está el puente sobre el río Yayabo,
único de su tipo que sobrevive en el país. Fue construido a principios del siglo
XIX y es una sólida estructura de cal, arena, y ladrillos, de cinco arcos.
Cuenta la tradición
que en Sancti Spíritus nació una prenda cubana muy tradicional y famosa, la
conocida guayabera. Algunos dicen que al comienzo la llamaban yayabera, porque
la usaban los campesinos de las cercanías del río Yayabo, después, se les llamó
guayabera, por la costumbre de llenar sus útiles bolsillos con esa deliciosa
fruta cubana: la Guayaba.
San Cristóbal de La Habana
Cuentan los cronistas que Pánfilo de Narváez –un hombre de Diego
Velázquez- realizó la primera fundación de La Habana en el año 1515, en tierras
ubicadas al sur de su localización actual, hoy ocupadas por el Surgidero de
Batabanó. Años más tarde, en 1519, la ciudad devenida capital colonial en 1589,
encontró asiento definitivo al norte de la región occidental de la Isla, al
lado de una bella bahía de bolsa, muy abrigada y conveniente para puerto y
asentamientos humanos. El 16 de noviembre de ese año, a la sombra de una Ceiba
que por allí existía, casi frente al mar, se celebró la primera misa y el
primer cabildo, y se declaró fundada la villa, con el nombre de San Cristóbal
de La Habana. Hoy por hoy es el principal polo turístico del país. Hoteles de
lujo, hostales confortables, cabaret famosos y restaurantes con la más variada
gastronomía, tanto autóctona como internacional, pueden satisfacer al gusto más
exigente. Además, un rosario de pequeñas playas, de blancas y finas arenas,
están a disposición de los bañistas todo el año, al este de la ciudad, a
escasos minutos de su centro urbano. Desde hace unos años, el centro histórico
de la Ciudad de La Habana, declarado monumento nacional por el Gobierno Cubano
en 1976 y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1982, es objeto de
hercúleas restauraciones, realizadas por un equipo de historiadores y
arquitectos dirigidos por la Oficina del Historiador de La Habana, Eusebio
Leal, encargado de los trabajos de renovación.
No comments:
Post a Comment